CIUDAD DEL ESTE
Wilson Ferreira
Según la denuncia, los limpiavidrios operan en los semáforos ubicados sobre la avenida Bernardino Caballero a la altura de la calle Eugenio Alejandrino Garay, frente al Palacio de Justicia y Primero de Mayo.
“Llegué al punto de que esperando en la fila limpiaron mi vidrio dos veces. Y es difícil tratar con ellos, porque no te preguntan, directamente ya derraman agua. Tengo que reconocer que no todos son así, están los que respetan y cuando le decís que no, paran; pero igual te piden dinero, de eso no te salvas”, comenta Ricardo Ramírez, conductor que todos los días cruza el semáforo ubicado en la zona del Mercado de Abasto.
Algunos son menores, otros ya son adultos y están en la calle todos los días. En la zona del Palacio de Justicia y el Centro Regional de Educación, Gaspar Rodríguez de Francia, dependiendo de la hora, se puede observar entre cinco a ocho jóvenes con sus respectivos equipos de “limpieza”.
En este punto están los más agresivos, aseguran los conductores que a diario circulan por el lugar. “A veces suele estar una mujer con ellos, son un grupo de entre cinco y 10 personas. Esta mujer a veces está totalmente fuera de sí y empieza a agredir verbalmente a aquellos que le dan algunas monedas. Una vez, incluso, tenía una piedra y con esta estaba amenazando a la gente que esperaba cruzar”, señaló un padre de familia que todos los días trae a su hijo hasta el Centro Regional y que pidió no ser identificado.
Hay sospechas de que muchos de los limpiavidrios apostados en estos dos nudos son consumidores de algún tipo de droga.
POR ZONAS. Los otros nudos semafóricos tampoco se salvan, pero en cada punto la situación es diferente.
Sobre la avenida Alejo García y Riva Ortellado no hay limpiavidrios, sí vendedores de frutas y remedios. Aquí, los trabajadores son muy amables, tratan con mucha educación a los conductores y no insisten si se les dice que no.
Un trato casi similar se tiene con los vendedores de frutas, principalmente de banana, instalados sobre la avenida Pioneros del Este y Bernardino Caballero, frente a la Municipalidad de Ciudad del Este. En este punto cada cierto tiempo aparecen mendigos en sillas de ruedas.
En los otros nudos sobre Alejo García y Concejal Romero no se tienen vendedores, al menos no todos los días.
Sobre Eugenio Alejandrino Garay hay dos nudos semafóricos antes de llegar hasta la zona del lago de la República. En los puntos están indígenas de la parcialidad Ava Guaraní, que cada cierto tiempo son llevados a sus comunidades de origen en Caaguazú y Caazapá, pero al poco tiempo terminan volviendo. No son agresivos, tampoco ofrecen servicios ni productos, directamente piden plata.
En este punto, por tratarse de indígenas, muchos conductores detienen su marcha y les entregan alimentos y abrigos. Muchos consideran un gesto de bondad, otros lo califican como un hecho que solo alienta la presencia de otros, que dejan todo en sus comunidades de origen para vivir como parias en la ciudad.
Sobre la ruta internacional número 7 Gaspar Rodríguez de Francia, a la altura del cruce con la avenida Perú, todos los días se puede observar un enjambre de vendedores de frutas, artículos electrónicos, antenas, pendrives, entre otros objetos, además de los tradicionales limpiavidrios.