18 abr. 2024

con brillo dorado

El jamaiquino Usain Bolt se convirtió en el primer atleta de la historia que conquista tres títulos olímpicos consecutivos de 100 metros al imponerse en la final de los Juegos de Río con un registro de 9”81 centésimas.

Un clásico. Tras la conquista del oro, el jamaiquino Usain Bolt hizo su clásica pose de festejo para el delirio del público en Río de Janeiro.

Un clásico. Tras la conquista del oro, el jamaiquino Usain Bolt hizo su clásica pose de festejo para el delirio del público en Río de Janeiro.

Ninguno de sus rivales fue capaz de hacerle sombra pese a que hace solo un mes había tenido problemas físicos. El estadounidense Justin Gatlin volvió a colgarse la medalla de plata con 9”89 y el canadiense Andre de Grasse completó el podio con 9”91 (bronce).

En un estadio Olímpico por vez primera en tres días repleto (56.000 espectadores) en su honor, Bolt se ganó al público brasileño, que le admitió como ídolo propio y coreó su nombre las tres veces que compareció en la pista, en tanto que abucheó con fuerza a Gatlin cada vez que apareció en pantalla. Con once títulos mundiales a sus espaldas, Bolt eleva a siete su colección de medallas olímpicas y logra el primero de los tres objetivos que se ha propuesto en Río. Ahora le quedan los 200 metros y el relevo 4x100 para rematar su triple-triple olímpico.

El mejor velocista de la historia, en posesión de los récords mundiales de 100 metros (9.58) y 200 (19.19), ambos conseguidos en los Mundiales de Berlín 2009, no ha vuelto a batir sus plusmarcas y es probable que, a punto de cumplir 30 años, ya nunca lo haga, salvo, tal vez, en 200 m, su prueba preferida que inicia la etapa de eliminatorias mañana desde las 10.00.