En un comunicado difundido hoy, la empresa estatal señaló que el acuerdo excluye un aumento salarial y principalmente considera un bono por término de conflicto de 4.350.000 pesos por trabajador (unos 6.590 dólares), equivalentes al 40 % de la cifra entregada en la negociación anterior, en diciembre de 2012.
Esa vez, el bono fue de 13.000.000 de pesos por trabajador (unos 19.696 dólares) y los mineros obtuvieron además un aumento salarial y un préstamo “blando” (sin intereses) de parte de la empresa.
De manera adicional, el acuerdo incluye un incentivo anual asociado a la disminución del costo directo de producción, con la meta de disminuirlo en 8 centavos de dólar por libra en 2017 y otros ocho centavos en 2018. De conseguirlo, tendrán un bono especial de 500.000 pesos (unos 757 dólares) en cada año.
La propuesta fue votada favorablemente este jueves por los sindicatos, por 2.206 votos a favor (61,06 %) y 1.338 en contra (38,79 %), además de registrarse cuatro votos nulos y uno en blanco.
La empresa estatal, que está inmersa en un proceso de reducción de costos para superar problemas financieros causados por la caída de precio del cobre, señaló en el comunicado que el acuerdo “sigue los lineamientos de austeridad aplicados en las últimas negociaciones de la Corporación”.
“En este acuerdo ambas partes han actuado con responsabilidad. La empresa ha hecho un esfuerzo por atender las expectativas de los trabajadores sin hipotecar la sustentabilidad financiera de la compañía y los trabajadores han comprendido la difícil situación de la Corporación y han actuado con realismo y compromiso”, destacó Sergio Parada, gerente general de Chuquicamata.
