Tras promover una solicitud de expulsión de la Asociación Nacional Republicana (ANR) del presidente de la República y el titular de la nucleación política, Alfaro manifestó que ambos políticos no solamente incurrieron en violaciones a la Constitución Nacional, sino también al estatuto partidario.
En ese sentido, refirió que, específicamente, fue el presidente del Partido Colorado el que más ha descuidado su deber. “Alliana es un ordenador de gastos, quiera o no quiera, es el presidente de una asociación que sí maneja dinero”, informó NoticiasPy.
“Hubo un descuido enorme, desde hace años que está descuidado el Partido Colorado, las seccionales coloradas se están cayendo, no hay reuniones, no hay charlas, no hay adoctrinamiento”, sostuvo.
Alegó que el descuido se debe a que la dirigencia de base no figura entre los intereses de las autoridades partidarias. “El Partido Colorado se utilizó como una plataforma por un gobierno empresarial que tenía sus intenciones, por algo quisieron llegar al poder, usaron y destruyeron el partido”, insistió.
Alfaro comentó que existe una división institucional a causa de las ambiciones de Cartes y Alliana. “Hoy se creó una diferencia, una brecha tan grande que ni la pelea que tuvieron los “guiones” y los “democráticos” en la época de 1947 (cuando se dio una guerra civil) iguala a la brecha que se está abriendo hoy a causa de una o dos personas que tienen ansias desmedidas de poder”, aseguró.
El dirigente colorado explicó que presentó la solicitud con la esperanza que el Tribunal de Conducta Partidaria y los miembros de la Junta de Gobierno actúen a su favor, “teniendo en cuenta que el pueblo juzgará el actuar de los mismos”.
Igualmente, pidió a las autoridades “que se obre consecuente a la verdad, a las leyes y, principalmente, a la Constitución Nacional”.
El pedido de expulsión de Cartes y Alliana fue realizado ante el Tribunal de Conducta del Partido Colorado por supuestamente violar los artículos 290, 189, 198, 216 y 217 de la Constitución Nacional.
El requerimiento se da en medio de la crisis interna que vive la ANR por las posturas a favor y en contra de la renuncia de Horacio Cartes a la Presidencia de la República, para luego jurar como senador activo, pese a que la Carta Magna establece que los ex mandatarios deben ser vitalicios.