Por Patricia Vargas
Ante la versión oficial de que se consiguieron los votos necesarios para el juicio político a integrantes de la Corte Suprema de Justicia Congreso, el ministro Víctor Núñez presentó su renuncia ante el pleno.
Esta situación sorprendió a todos sus colegas, sobre todo a aquellos que están en la misma situación, como por ejemplo Miguel Óscar Bajac, Sindulfo Blanco y Cesar Garay Zuccolillo. A esta lista se sumaron recientemente Antonio Fretes y Gladys Bareiro de Módica. Todos están amenazados con ser juzgados por el Senado antes de que culmine en 2014.
Cerca de las 12.10 el secretario privado de Núñez, Claudio Vera, se encargó de redactar la escueta nota de renuncia de su jefe. “Tengo el agrado de dirigirme a V. E. para comunicarle por este medio mi renuncia al cargo de ministro de la Corte Suprema de Justicia”, reza el documento.
A las 12.20 intentaron hacer copias de este escrito para repartirlo al pleno, pero la fotocopiadora del despacho de Núñez se averió, por lo que las copias debieron hacerse en otro despacho.
A las 12.40 las cartas estaban echadas, y el ministro se reunió con el pleno y allí anunció su dimisión.
Trascendental. El lunes hubo una reunión entre el presidente Horacio Cartes, el titular de la Cámara de Diputados, Hugo Velázquez (ANR), y la presidenta del Partido Colorado, la senadora Lilian Samaniego. También estuvieron Enrique Bacchetta, Mario Abdo Benítez, Arnoldo Wiens y otros.
En el encuentro se analizaron los números respecto a los votos para el juzgamiento político, que tiene su origen en la Cámara Baja.
Supuestamente en esa reunión se dejó claro que los votos aún no se tenían, pero que se conseguirían fácilmente.
Esta situación animó aún más a Núñez a presentar su renuncia, aunque desde la semana pasada venía analizando hacerlo, atendiendo a que no estaba preparado para enfrentar un juicio político. Es más, la renuncia estaba prevista para hoy, pero, tras enterarse que podrían haber votos para el juicio, la decisión se apresuró.
¿Cómo empezó? La inminencia de un juicio se planteó con mayor fuerza luego de la crisis política desatada a raíz del asesinato del periodista Pablo Medina y las presuntas relaciones de los políticos con capos del narcotráfico.
En el caso del ahora ministro renunciante, los senadores Enrique Bacchetta, Arnaldo Giuzzio y Desirée Masi y otros resaltaron su posible responsabilidad en la habilitación del entonces candidato a intendente de Ypejhú, Vilmar Neneco Acosta, como candidato a intendente.
Acosta y su hermano Willian Acosta están prófugos desde que la Fiscalía los imputó por ser presuntamente los autores moral y material, respectivamente, del crimen de Medina en donde también resultó asesinada Antonia Alama, asistente del comunicador. El propio Partido Colorado (ANR) y el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) decidieron enjuiciar a cuatro ministros.
Esto, a diferencia de que los colorados también incluyeron en su agenda al ministro del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), Alberto Ramírez Zambonini, situación que casi resultó una traba para enjuiciar a los ministros de la Corte.
No al juicio. El 4 de noviembre, Núñez anunció en conferencia de prensa que no iba a someterse a un juicio político.
“No me voy a someter a un juicio político de estos bárbaros que con cualquier acusación se van, piden que levanten las manos nomás y no saben por qué están votando”, expresó esa vez.
En la ocasión, culpó a los senadores Luis Alberto Wagner, Miguel Abdón Saguier y Blas Llano de instigar al juzgamiento.