Poco más de 2,8 millones de moldavos están convocados a las urnas para elegir a su jefe de Estado entre el socialista y prorruso Igor Dodon, favorito según los sondeos, y la europeísta de centroderecha Maia Sandu.
La votación tiene lugar en más de 2.000 colegios electorales abiertos por todo el país y en otro centenar habilitados en el extranjero.
Más de 2.500 observadores locales y otro medio millar procedentes del extranjero vigilaran la votación.
Estos son los primeros comicios presidenciales directos que se celebran Moldavia desde 1996, ya que la elección del jefe del Estado era prerrogativa del Parlamento.
Al igual que en la primera vuelta, los comicios no se celebran en la región separatista de Transnistria, por lo que la Comisión Electoral Central moldava ha habilitado colegios electorales junto a sus límites para que los ciudadanos residentes en ella puedan ejercer su derecho a voto.
