EFE
El estudio, basado en los testimonios de 22.000 personas, incluidos 11.000 jóvenes (entre 18 y 24 años) y adolescentes (entre 14 y 17), también certifica que el riesgo de ser víctima de la explotación y la trata es mayor entre los menores de 25 años que entre quienes han cumplido o superado esa edad, pues la probabilidad casi se duplica en el Mediterráneo oriental y es un 13% mayor en la ruta central.
Además, la investigación concluye que los adolescentes y jóvenes procedentes del África subsahariana corren un riesgo mayor de sufrir explotación y verse afectados por la trata que los procedentes de otras partes del mundo.
Así, el 65% de los subsaharianos que llega a Europa por el Mediterráneo oriental ha padecido algún tipo de explotación, frente al 15% originario de otras regiones que recorre la misma ruta.
En el caso del Mediterráneo central, el 83% de subsaharianos frente al 56% de personas de otras nacionalidades experimenta algún tipo de explotación o tráfico.
Según UNICEF y la Organización Internacional para las Migraciones, el racismo es “probablemente un factor subyacente importante” detrás de esa diferencia.
Igualmente, los adolescentes y jóvenes que viajan solos o durante largos periodos de tiempo, así como aquellos que poseen menores niveles de educación también son muy vulnerables a la explotación de los traficantes y los grupos criminales durante sus trayectos.
Según el informe, la ruta del Mediterráneo central es “particularmente peligrosa”, dada la anarquía en Libia, junto con la presencia de las milicias y la criminalidad.
“La dura realidad es que ahora es una práctica habitual que los niños que se desplazan por el Mediterráneo sean víctimas de abusos y tráfico, sean golpeados y sufran discriminación”, declaró el director regional de UNICEF y coordinador especial para la crisis de refugiados e inmigrantes en Europa, Afshan Khan.
Agregó que los líderes de la Unión Europea deberían poner en marcha “soluciones duraderas” que incluyan rutas migratorias “seguras y legales”, e instó a establecer corredores de protección y a buscar alternativas a la detención de inmigrantes menores de edad.