Durante el juicio declararon testigos presenciales del hecho y se exhibieron las armas de fuego y la motocicleta utilizada por los autores para perpetrar el hecho.
El Tribunal que analizó las pruebas y condenó a Giménez Báez estuvo presidido por el juez Trinidad Zelaya, e integrado por los magistrados Benito González y Zunilda Duarte. Asimismo, el fiscal Jorge Romero se ocupó del caso en representación del Ministerio Público.
El suceso ocurrió el 18 de febrero de 2013, en un local de la firma Jasy Cambios. En aquella ocasión tres personas ingresaron al mencionado recinto con armas de fuego y solicitaron la entrega de dinero que se hallaba disponible en la caja. Luego, ante la inminente llegada de efectivos policiales, salieron del lugar tomando como rehenes al gerente del local, Diosnel Moisés Gadea, y a su hija menor de 13 años.
Posteriormente, Diosnel Gadea insistió a los maleantes en que liberen a su hija, pero como respuesta recibió varios disparos por parte de Giménez Báez, lo que derivó en su muerte. El autor del hecho y sus cómplices se dieron a la fuga a bordo de una motocicleta, sin embargo, fueron aprehendidos luego de un enfrentamiento a tiros con agentes de la Policía.