En conversación con ÚH, el ingeniero Luis Lavigne, presidente de la Cámara de Distribuidores de Materiales de Construcción (Cadimaco), sostuvo que están preocupados porque las consecuencias negativas de la pandemia ya están empezando a salpicar negativamente al sector.
Recordó que el año pasado tuvieron un semestre muy duro por las restricciones impuestas por el Gobierno durante abril y mayo. “Sin embargo, en el segundo semestre se dio un fenómeno donde mucha gente se volcó al rubro de construcción”, indicó.
Añadió que tuvieron una segunda parte buena en el año 2020, pese a que las cementeras locales no acompañaron. “Empezamos este año pensando que ese fenómeno se iba a mantener, pero lastimosamente en la última reunión de directorio de miembros del gremio se reportó que hubo una caída de entre el 10 y 15 por ciento de la venta”, enfatizó.
Refirió que, por suerte, a este momento flojo no se le sumó algún problema de provisión de las cementeras nacionales porque, de hecho, lo están haciendo ahora con total regularidad. “Están cumpliendo bien, pero no podemos escapar y ser una burbuja que se escapa de la realidad de la economía del país”, remarcó.
Lavigne manifestó que están un poco preocupados y en el intercambio de ideas a nivel de Cadimaco entienden que una de las salidas para mover más la economía es acelerar el ritmo de vacunación, “porque una vez que tengamos a la mayor cantidad de la población vacunada seguirán liberando las áreas y volver a recuperar el dinamismo de la economía”.
Comentó que, de acuerdo con los datos que manejan, ahora hay obras civiles, pero las mismas disminuyeron el ritmo. “Las empresas están con mayores dificultades para cumplir y sentimos la falta de circulante. Hay obras que siguen, pero aparecen retrasos en los pagos. Evidentemente, esto dice que no estamos bien”, enfatizó.
En cuanto a las obras públicas, señaló que la mayoría de las empresas que integran Cadimaco proveen a construcciones que a su vez tienen contratos con entidades públicas. “No trabajamos en forma directa, pero sí sentimos que hay también disminución. El año pasado era impresionante el dinamismo de estas constructoras que operan con el Estado, pero hoy están un poco más frenadas”, recalcó.
Sostuvo que, por experiencia, en la economía se siente enseguida cuando el Estado invierte en obras públicas y cumple con las empresas. Indicó que, por ende, esperan que el Gobierno acelere el ritmo de las obras.
Finalmente, consultado sobre el precio actual de las bolsas de cemento de 50 kilos, Lavigne señaló que en promedio están en cincuenta mil guaraníes en los depósitos.
Las obras públicas El panorama de la industria de la construcción tiende a agravarse aún con el anuncio realizado el viernes pasado por el ministro de Obras Públicas, Arnoldo Wiens, durante un acto oficial en Edelira, Itapúa, en la inauguración de un tramo vial.
“Este año 2021, ¿cómo estamos? Estamos con una situación económica difícil para el MOCP. Desde agosto del año pasado, Hacienda nos comunicó que no podemos hacer más llamados sujetos a fondos propios”, explicó durante el acto oficial. Lo que quiere decir que no habrá obras nuevas por falta de financiación.