El cierre de un pasillo en 29 Proyectada y General Aquino, del barrio Roberto L. Petit, enfrenta a dos familias del lugar, ya que, según una de las partes, ello obliga a transitar por el borde de un muro y expone a la gente a caer al fondo del contaminado arroyo Ferreira.
Evelyn Andrea Franco solicitó la intervención de la Comuna capitalina, lo que consta en el expediente 7589/19, para buscar una solución al problema.
Zulema viuda de Jara, quien se moviliza con bastón, señaló que su única salida es por el angosto muro y que por esa clausura ni siquiera puede recibir atención médica. Esto fue ratificado por Francisca Ruiz Díaz, la que apuntó que la gente pasa por sus piezas para ir hacia 27, donde no se tiene rampa para personas con discapacidad.
En su descargo, Luisa Martínez de Castillo, dueña del predio sindicado como pasillo, explicó que tiene los papeles que acreditan que se trata de su propiedad. “No es cierto que se trata de un pasillo. Es mi terreno. Tuve que poner un portón porque ellos tenían perros agresivos y ahí se juntan adictos y compran cosas robadas por ellos”.