Los piratas abordaron el barco ayer, después de que dejara en las Seychelles a un número indeterminado de turistas y quedaran a bordo sólo los siete miembros de la tripulación, todos originarios del archipiélago.

Fotografía cedida en abril de 2008 por la marina francesa que muestra a los tripulantes del yate de lujo “Le Ponant” después de ser evacuados de su barco tras su liberación de unos piratas en la costa de Somalia. Ayer fue secuestrado otro yate cerca de las Seychelles. EFE/Archivo | Ampliar imagen
Fuentes oficiales de las islas consultados por Ecoterra afirmaron que “es muy posible que el barco se dirija ahora hacia la costa somalí, de donde se sospecha que procedan los asaltantes”, aunque no pudieron confirmar con certeza este último extremo.
El ministro de Asuntos Exteriores de las Seychelles, Patrick Pillay, afirmó que su Gobierno se ha puesto en contacto con “fuerzas navales de la región para localizar el barco y liberar a los secuestrados”.
Barcos de las armadas de diversos países patrullan las aguas de Somalia y el golfo de Adén, que da acceso al mar Rojo y el canal de Suez, para tratar de evitar las acciones de los piratas somalís, que han convertido la zona, una de las más transitadas por buques comerciales, en una de las más peligrosas del planeta.
Con los últimos secuestros y liberaciones, aún quedan 12 barcos extranjeros con al menos 219 tripulantes -96 de ellos filipinos-, que continúan en manos de piratas somalís, informó Ecoterra.
En lo que va de año, los piratas han atacado 42 embarcaciones y conseguido secuestrar a 11 de ellas.