La comitiva liderada por el fiscal Meiji Udagawa llegó hasta el lugar, donde tenían la información de que habían construido un campamento narco.
El operativo se realiza en el marco de la lucha contra el avance del narcotráfico en los establecimientos rurales, informaron los intervinientes.
La información que ya manejaban los expertos fue confirmada cuando encontraron, en medio del monte, carpas construidas por los presuntos narcotraficantes donde se halló la droga distribuida en 45 paquetes.
Se sospecha que el cargamento había sido recién empaquetado con destino a otro lugar de ocultamiento en puntos urbanos fronterizos con el Brasil, según mencionaron los intervinientes.
En total, la mercancía pesó 1.575 kilos de la sustancia prohibida, de acuerdo al informe presentado y difundido por el Departamento de Comunicación de Senad.
El agente del Ministerio Público que estuvo adelante de la investigación determinó que la carga sea quemada y destruida en el lugar.
Como suele ser reiterativo en este tipo de incursiones, no se reportaron detenidos. Los agentes no hallaron a ningún responsable del cargamento ni a ninguna persona que esté cuidando del campamento.
Desde la secretaría de Estado indicaron que seguirán los trabajos en la zona, tanto en la destrucción de plantaciones como en incautación de mercaderías.
Los antidrogas apuntan a desbaratar a organizaciones que trabajan en el interior de establecimientos rurales, sobre todo en la plantación de marihuana y también en el procesamiento.