Edoardo Bove, a los 63’, marcó el tanto de la victoria para el equipo dirigido por José Mourinho, quien recibió en el Olímpico de Roma al que conduce un alumno suyo, Xabi Alonso. Bove desató la locura en el estadio, para que su equipo se ilusione con la que podría ser su segunda final europea consecutiva.
Por su parte, en Turín la Juve tuvo que esperar hasta el minuto 97 para que el defensor Federico Gatti empate agónicamente, de cabeza, un encuentro mayormente favorable en sus acciones para el Sevilla, que abrió el marcador a los 26’ mediante Youssef En-Nesyri, en un primer tiempo ampliamente dominado por los andaluces.
Ambas revanchas se juegan el próximo jueves.