El Grand Salón del Sheraton Asunción Hotel fue el escenario de la unión matrimonial de Rosmary Rodríguez Valinotti y Fernando Escobeiro Airaldi, hace 9 años.
La ceremonia religiosa, la unión civil, así como la fiesta, se desarrollaron en el mismo lugar, que estuvo románticamente ambientado por Elvira Llano.
La pareja se conoció en noviembre del 2009, en una fiesta noventosa. Tres meses más tarde, un 14 de febrero, se comprometieron.
En la inolvidable noche de bodas, la novia lució un vestido corte sirena, con brodery en la falda, realizado por Celine Miranda. El traje de strapless y escote V fue de estilo vanguardista y estuvo confeccionado con seda natural y bordado con cristales swarovski. Complementó su look nupcial con un tocado en forma de turbante, también bordado con cristales, creación de Dolly Ruffinelli. En las manos llevó un bouquet de lirios blancos y gipsofilas, preparado por Tetí de Llano.
El grupo Mega Beats y Pana Pino estuvieron a cargo de la animación de la divertida fiesta.
Rosmary recuerda que la celebración de su casamiento duró casi 10 horas. “Nos casamos en una ceremonia íntima y maravillosa con nuestros seres queridos más allegados. La boda arrancó a las 11:00 de la mañana y terminó a las 21:00, realmente nos quedamos cortos”, rememora entre risas.
Luego fueron de luna de miel a un tour por Europa.
De este matrimonio nacieron María Fernanda, de 8 años, y las gemelas María Antonella y María Isabella, de 3 años y 6 meses. “Son los mejores regalos del cielo”, refiere Rosmary.
Este año, Rosmary y Fernando celebran sus bodas de arcilla, constantemente van moldeando el amor que se tienen mutuamente, consolidando así la hermosa familia que formaron juntos.
