El propio pastor lo contó en un video que posteó en Instagram: “Cuando los vi llegar al santuario con sus pistolas, le dije a todo el mundo que se agachara, todo el mundo al suelo. No sabía si querían disparar a la iglesia o si venían solo para robar”, dijo.
Una vez pasado el robo, Whitehead habló el lunes con la cadena WBCS, y le dijo: “Sabían (lo que hacían), me observaron y sabían que yo tenía otras joyas”, aseguró, al explicar cómo los ladrones buscaron minuciosamente debajo de sus ropas.
Tras el robo, los ladrones huyeron a pie y subieron a un Mercedes-Benz. El pastor, amigo personal del alcalde Eric Adams, utilizó el video de Instagram para defenderse de los comentarios que explicaban el robo por su afición al lujo. “Es derecho mío comprar lo que quiero. He trabajado duro para lograrlo”, dijo. EFE