Papá Noel, Santa Claus, Karai vosa o quien fuera el que se encarga de traer los regalos en Navidad, nos deja un pequeño obsequio que el año que viene tendrá a la clase política bastante ocupada, mientras la situación social probablemente quede de nuevo en segundo plano.
Puede ser una equivocación de uno de estos personajes tan gentiles en darnos regalos sin pagarle nada o, en verdad, es lo que realmente nos merecemos como obsequio.
Lo cierto es que antes de que se cierre el año ya tenemos como “regalo” un equipo de precandidatos a la presidencia de la República, con cuyo número de interesados perfectamente se puede armar un elenco de fútbol de campo.
Son, hasta ahora, once (entre ellos un religioso) los que desean ser candidatos para llegar a la titularidad del Ejecutivo en una competencia que se realizará recién dentro de un año y medio.
Usando el término futbolero podemos decir que el equipo está conformado por: José Luis Chilavert en el arco, Nicanor Duarte Frutos, José Alberto Alderete, Víctor Bernal, Blanca Ovelar y Luis Alberto Castiglioni en la defensa; Federico Franco, Carlos Mateo Balmelli y Alfredo “Goli” Stroessner en el medio y; Fernando Lugo y Pedro Fadul en la delantera, el primero por izquierda y el segundo por la derecha.
Parece un chiste, pero es cierto. Son once los que están en la lista de jugadores autoconvocados como precandidatos, aunque también están los suplentes, entre ellos, Rogelio Benítez, Javier Zacarías Irún, Blas Llano, Julio César Franco, entre otros más.
Chilavert reiteró que está dispuesto ser candidato presidencial y dijo que unas cinco mil personas, en una visita en Villarrica, gritaron: “Se siente, se siente, Chila presidente”.
Nicanor sigue con la idea de lograr su reelección, pero pareciera que su “habilitación legal” no le llegará a tiempo. Alderete y Bernal pelean por convertirse en la mejor “defensa”, mientras que Castiglioni tiene un “empresario” extranjero que presiona para su nominación. La ministra de Educación, hasta ahora la única mujer en este equipo, reconoció que no le desagrada el eventual puesto.
En el “medio” están Federico Franco, quien el domingo pasado anunció oficialmente que buscará la designación por el Partido Liberal, al igual que su correligionario Mateo Balmelli que ya hace tiempo trabaja por estar en el elenco. Completa el medio campo el disidente colorado “Goli” Stroessner, ya que esta semana confirmó que analiza la posibilidad de pelear el sillón que su abuelo, el ex dictador Alfredo Stroessner, ocupó por 35 años.
En la delantera, por un sector, está ubicado Lugo, que ahora deberá esperar su “pase” desde el Vaticano, mientras que en la otra punta, Fadul ruega al mismo Dios que esa habilitación no llegue nunca.
El año que viene el escenario cambiará y tendrán que quedar solo dos para enfrentarse entre sí, porque la disputa al final no será un partido de fútbol sino una pelea de boxeo. R.F.