El fallo fue dictado en forma unánime por los camaristas Gustavo Auadre, Andrea Vera Aldana y Enrique Mercado, del Tribunal de Apelación Penal de la Adolescencia de la capital. Es en el caso del presunto desvío de 68.000 millones del Ministerio de Agricultura.
El pasado miércoles, el abogado Ricardo Preda había recusado a los jueces Elsa García, Jesús Riera y Héctor Fabián Escobar, porque no le dieron intervención a la abogada Carla Marcet, ex defensora pública.
Esto, porque el juez Riera señaló que tenía causales de inhibición con la misma por amistad, pese a que en otros juicios, cuando era defensora pública, no se inhibió de ella, por lo que alegó que no sabía esa circunstancia.
Según la recusación, la defensa no podía adivinar que el juez se inhibiría, porque, de lo contrario, se hubiera apartado en todos los casos, aun cuando ella era defensora pública.
Los camaristas entienden que la recusación se hizo con el solo objetivo de trabar el inicio del juicio oral, que ya lleva 9 años. Advierten que la recusación debe ser usada con buena fe, evitando planteos dilatorios y sin olvidar que los jueces tienen poder de disciplina.
Con ello, desestiman la recusación, y disponen que se obtengan copias de la recusación y se forme un expediente disciplinario en contra del abogado, a quien se le corre traslado por 3 días al profesional para que se defienda.
Además, encomienda a la Dirección General de Auditoría de Gestión Jurisdiccional para seguir “las posibles futuras y eventuales incidencias” para que comisione un funcionario que labre acta de todo lo que suceda y se informa al Consejo de Superintendencia.