En vista de las vacancias que se producirán en la cúpula del organismo electoral este año, ya empezó la danza de candidaturas entre las que llama la atención la de los senadores.
De inmediato saltan algunos cuestionamientos –en los pasillos del Congreso– por la forma en que los postulantes buscan puntos extras con publicaciones hechas a medida del cargo y sobre la hora. La crítica apunta al reciente libro que lanzó la senadora Alvarenga, quien integra la mesa directiva del Senado, solo dos días antes de inscribirse para concursar por el cargo.
La publicación que se dio el pasado miércoles se titula Ley N° 635/1995 “Que reglamenta la Justicia Electoral”. Bases constitucionales, internacionales, legales y reglamentarias. Comentado y concordado.
En lo que concierne a los requisitos para concursar, en el apartado Publicaciones, el artículo 39 del concurso establece que “serán puntuados los libros impresos en formato papel o publicaciones en formato digital, de más de 150 páginas; se otorgará puntaje hasta un máximo de dos publicaciones...”.
El reglamento establece que serán puntuables libros a partir de 151 páginas como mínimo. La publicación de la senadora tuvo 174 páginas. Alvarenga tiene larga experiencia en enseñanza primaria y secundaria, y si bien formó parte de la cúpula directiva de una universidad de la que es propietaria, no tiene experiencia en el campo superior ni sobre derecho, que es uno de los requisitos para concursar por el cargo en el TSJE. La senadora también zigzagueó en su postura a finales del año pasado cuando de ser proponente de un proyecto de volver a las listas sábanas, junto a Abel González, José Ledesma y Octavio Schatp, finalmente optó por retroceder. En su crítica al voto preferencial había dicho que no llegan los que más votos tienen.
CURSOS RÁPIDOS. En lo que concierne a Juan Bartolomé Ramírez, quien en la última sesión renunció a su cargo de senador, este viene preparándose de manera dinámica antes de que se inicie el concurso.
Precisamente una tesis de posgrado a la que se abocó el senador coincide con el tiempo que decidió pugnar por el cargo de ministro. El tema de su maestría llamativamente también tiene relación con lo electoral, Consideraciones sobre la figura de viceintendente. Consultado sobre el propósito de su preparación confirmó que es tendiente a que la idoneidad “es un aspecto a ser valorado”. Los puntos a evaluar son Idoneidad profesional (hasta 60 puntos), audiencia pública (hasta 20 puntos) y finalmente lo que será la evaluación integral (hasta 20 puntos).