Mientras la ciudadanía se concentra en la calle a diario para pedir reformas estructurales para conseguir una mejor salud pública, educación gratuita, pensiones dignas y precios más bajos en servicios básicos, emprendedores de pequeños negocios ven su economía dinamitada de forma directa o indirecta por las manifestaciones.
El Gobierno calculó que cerca de 6.800 son las pymes que sufrieron violencia, vandalismo o destrucción desde el inicio de las protestas, el pasado 18 de octubre.
En la primera semana de protestas hubo pérdidas comerciales de más de 1.400 millones de dólares, según la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), de los que 900 millones de dólares serían solo en destrozos a causa de saqueos y destrucción de tiendas y los otros 500 por la falta de ventas por robos y cierre de comercios. Hasta la fecha, las ventas del comercio cayeron un 10% anual desde el inicio de las protestas, y las de turismo y entretenimiento lo hicieron en un 36%, según datos de la CCS. EFE