NUEVA YORK - EEUU
Los precios del crudo subieron y operaron cerca de máximos desde marzo de 2015, ya que preocupaciones políticas en algunos países integrantes de la OPEP contrarrestaron proyecciones de una mayor producción en Estados Unidos.
El petróleo intermedio de Texas (WTI) subió 0,47% y cerró en 61,73 dólares el barril, tras una sesión en la que los inversores estuvieron pendientes del accidente de un petrolero iraní en el Mar Oriental de China. Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en febrero, los de más próximo vencimiento, subieron 0,29 dólares con respecto al cierre anterior.
Por su parte, los contratos de gasolina para entrega en febrero, que también siguen siendo de referencia, terminaron sin grandes cambios en 1,79 dólares el galón.
Finalmente, los contratos de gas natural con vencimiento en ese mismo mes subieron durante el día 4 centavos y acabaron en 2,83 dólares por cada mil pies cúbicos.
PETROLEO EUROPEO. El barril de petróleo Brent para entrega en marzo cerró en el mercado de futuros de Londres en 67,78 dólares, 0,22% más que al término de la sesión anterior.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, finalizó la sesión en el International Exchange Futures con un aumento de 0,15 dólares respecto a la última negociación, cuando acabó en 67,63 dólares.
El petróleo de referencia en Estados Unidos cerró el día con ligeros avances después de una sesión tranquila en el Nymex en la que los operadores siguieron pendientes del accidente de un petrolero iraní en el Mar Oriental de China.
Los precios fueron ayudados por una ligera merma en la cantidad de yacimientos operativos en Estados Unidos. Analistas estiman que esa merma puede mitigar el riesgo de que con la valorización que viene registrando el crudo, los productores aumenten las extracciones.
No obstante, el analista Robert Yawger, de la firma Mizuho, dijo que “cuando se observan las cifras semanales de la producción estadounidense queda claro que se está muy cerca de niveles récord”.
Esa generosa producción sin embargo no impide que los inventarios bajen, apuntó. “No hay interés en acumular stocks sino en refinar y exportar rápidamente”, dijo.
Preciso que el ritmo de trabajo de las refinerías estadounidense es el más alto desde 2005.