Marcelo Fernando Pinheiro Veiga, más conocido como Marcelo Piloto, quien en pocos días acaparó la atención de la ciudadanía, con explosivas declaraciones primero y el sábado pasado con un terrible crimen cometido en su propia celda, podría no salirse con el objetivo trazado.
Pese al homicidio de la joven Lidia Meza Burgos, el confeso narcotraficante brasileño igual puede ser extraditado por nuestro país al Brasil para que pague su deuda con la ciudadanía, y completar una condena de 26 años.
En el vecino país, si hay voluntad política de la Justicia, podría ser juzgado por el hecho que se cometió en la Agrupación Especializada.
Es que la mayoría de las autoridades e investigadores creen que la muerte de la joven, de varias puñaladas, es una estrategia del propio Piloto, líder del Comando Vermelho, para evitar que sea extraditado al Brasil, donde debe cumplir la pena carcelaria mencionada.
Precedentes. Según explicó el juez Miguel Tadeo Fernández al ser consultado sobre el caso, ya existen precedentes de que un ciudadano brasileño que cometió un crimen en nuestro país es juzgado allá, donde también cumple con la pena.
El magistrado fue categórico al afirmar: “Creo que el homicidio no evita que sea extraditado”.
Esto, porque la fiscala María Irene Álvarez, quien está al frente de la investigación del asesinato de Lidia Meza, puede investigar el caso y luego remitir los antecedentes al Brasil para que sea juzgado allá.
La cuestión es que existen una serie de requisitos que deben cumplirse para el caso, indicó el juez, en referencia al finiquito de la extradición que ya fue otorgada, pero fue cuestionada por la defensa de Marcelo Pinheiro.
La clave. Otras fuentes consultadas revelaron que el artículo 7 del Código Penal brasileño contempla la posibilidad de que los brasileños que cometan delitos en el extranjero sean juzgados en su país, y cumplir la pena.
Además, esto es equiparable al artículo 9 del Código Penal paraguayo, que contempla también la posibilidad de que la ley penal paraguaya se aplique a hechos realizados en el extranjero.
Precedente. Actualmente, el ciudadano brasileño Flavio Acosta es juzgado en el Brasil, por el crimen del periodista Pablo Medina, ocurrido en octubre del 2014.
Lo que las fuentes señalan es que lo principal es que el crimen de la joven Lidia Meza no quede impune, pero que no sea también un ejemplo a seguir por otros, de modo a evitar una extradición.
Prosegur. Otro precedente es el asalto tipo comando que realizaron soldados del PCC a Prosegur, en Ciudad del Este, en abril de 2017, cuando 40 delincuentes mataron a un suboficial, sitiaron la ciudad y robaron USD 12 millones.
El 16 de octubre pasado, ocho de esos asaltantes fueron condenados en Brasil a penas que van de 8 a 20 años.
Todo gira entorno a decisión de Apelación
El principal requisito para que Marcelo Piloto vaya al Brasil es que la sentencia que admite la extradición esté firme. La resolución de la jueza de Garantías, Alicia Pedrozo, aún es estudiado por el Tribunal de Apelación en lo Penal, Tercera Sala, integrado los camaristas Cristóbal Sánchez, José Waldir Servín y Agustín Lovera Cañete. La apelación de la defensa contra la resolución no fue resuelta. El pasado viernes Piloto recusó a la jueza Claudia Scappini, y al fiscal, Enrique Díaz Alegre, con lo que trabó una audiencia preliminar donde se pedía aplicar el criterio de oportunidad por la extradición. Algunas fuentes señalan que la magistrada podría haber resuelto directamente la cuestión, y no hacer una preliminar, ya que se beneficia al procesado.