Estas herramientas y oportunidades pasan por una articulación pública y privada. Y es que, aclara, para ellos no solamente está lo que ejecutan como Ministerio, sino lo que coordinan con otras instituciones públicas y también con el sector privado, “porque el bienestar social tiene que darse en sentido amplio. Todos construimos el bienestar social, todos definimos a nuestro país”.
El bienestar social, insiste, no es algo que responda a las propuestas de un solo Ministerio o de una sola institución, “si no sería una visión muy parcial de lo que es esa concepción integral que hay que proyectar”.
Lema estuvo en Asunción la semana pasada para participar de la reunión de ministros de Desarrollo Social de países del Mercosur, bajo la presidencia pro tempore paraguaya del bloque sudamericano.
El ministro, que fue presidente de la Cámara de Representantes, afirma que la transparencia, en el sentido de que se sepa con detalles cómo se canaliza cada uno de los recursos y aportes destinados a los planes y programas sociales es clave para lograr la adhesión y credibilidad hacia las acciones emprendidas. “Además de la consigna que nosotros tenemos que es: Ni una persona por perdida”. Esto significa que la actitud de cada día tiene que ser “rebelarnos contra lo injusto”. Además, de tomar conciencia de la importancia del ejercicio de destruir el “No se puede”.
Ejemplos
Hablar de políticas sociales es hablar de accesibilidad a servicios en sentido amplio, expresa Lema. “Servicio a la salud, a educación, y a otros que generan mayor inclusión social. Por ejemplo, energía eléctrica”. Una de las acciones que impulsaron desde enero de este año fue otorgar bonificaciones de hasta un 90% en hogares vulnerables en el acceso a la energía eléctrica. “Esto genera que reciban energía eléctrica más económica de una mayor calidad, que evite una cantidad de accidentes”. Se pone un mayor alcance a servicios que no presta directamente el Ministerio de Desarrollo Social, pero en conjunto con la Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas (UTE) se pudo establecer el bono social que llegó a más de 120 mil hogares.
Agrega otro ejemplo vinculado al suministro de gas. “Logramos una articulación de varias instituciones para pedir que se congele el precio del servicio de provisión de gas, a pesar del contexto internacional, pero a su vez llevamos a un 50% de descuento en la recarga de gas a los hogares vulnerables”, agrega. También crearon el “cupo Mides” mediante convenios con empresas, sin costo para el Ministerio, para que porcentajes de vacantes que se van generando sean para participantes de los programas ejecutados por la institución.
El Ministerio también trabaja actualmente con 4 prestadores de salud del sector privado que están trabajando en diferentes causas, atendiendo, como parte de su responsabilidad social, casos de salud mental y adicciones que afectan a personas en situación de calle. “Hay que tener muy presente que cuanto más esfuerzos se concreten, mejor atención tiene nuestra gente, sobre todo quienes más precisan. Estamos obsesionados para darle lo mejor y la mayor cantidad de herramientas a aquellos que más necesitan”, expresa.
Uruguay cuenta desde 2015 con una Ley de Cuidados (Nº 19353), por el que se creó el Sistema de Cuidados. Concretamente se reconoce al cuidado como un derecho social. Esto significa que todas las personas en situación de dependencia tienen derecho a cuidados de calidad y que el Estado asume la responsabilidad de garantizar su provisión efectiva.
“Apuntamos a mejorar indicadores, porque eso quiere decir que las personas están mejor”, dice el ministro, para quien es central atender las causas de los problemas sociales.
Queremos atender las causas que llevan a las consecuencias. Si no, vamos a estar reaccionando y no accionando preventivamente.
La construcción del bienestar social no es algo que responda a las propuestas de un solo ministerio o de una sola institución.
Entrevista a Martín lema, ministro de desarrollo social del Uruguay