30 abr. 2024

Narcos, guerrilleros y políticos son el nuevo desafío para la Iglesia

El obispo de Caacupé, monseñor Claudio Giménez, también lanzó duras críticas hacia los masones.

Fiesta mariana.  Miles de feligreses de la Iglesia Católica se congregaron ayer durante la celebración principal de la santa misa en honor a la Virgen de Caacupé en la explanada del Santuario  .

Fiesta mariana. Miles de feligreses de la Iglesia Católica se congregaron ayer durante la celebración principal de la santa misa en honor a la Virgen de Caacupé en la explanada del Santuario .

"¿Quién se hace cargo de los narcotraficantes?; ¿y de los guerrilleros?; ¿y de los masones? ¿Qué se hace con los masones?; ¿que ha hecho la Iglesia? Ellos dicen que son católicos, pero mienten para ganar más adeptos”, cuestionó el obispo de Caacupé y presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), Claudio Giménez, durante la homilía de la santa misa que se celebró ayer en honor a la Virgen de Caacupé.

El alto representante de la Iglesia Católica criticó que Paraguay sea el segundo país más corrupto de la región, solo por detrás de Venezuela. “Abundan los narcopolíticos y la tendencia a ser corruptos. Pasamos una vergüenza internacional”, lamentó.

También se preguntó: "¿quién se hace cargo de las prostitutas, homosexuales y lesbianas?”, un cuestionamiento que recibió el aplauso de los miles de feligreses que llegaron hasta el Santuario para la fiesta mariana. Añadió que hay un verdadero desafío para “la creación de nuevos carismas para hacerse cargo de los políticos, narcotraficantes, guerrilleros, prostitutas, lesbianas y homosexuales. Hay que buscar una solución. El evangelio debe llegar a todos sin excepción”, mencionó.

Mons. Giménez criticó el proceso de la justicia en el país, la cual debe ser pronta y barata. “Los jueces saben cuál es su obligación y que no deben estar esperando pagos extras para torcer resultados hacia intereses de personas inescrupulosas que dañan a la sociedad y que destruyen la nación”.

Para cambiar esta situación en el país, mencionó que el cambio debe surgir de cada persona; caso contrario, no debemos hacernos “sueños imposibles si es que eso no pasa, si el cambio no empieza por el propio corazón”. Reflexionó que es importante practicar la honestidad, la trasparencia en nuestras gestiones laborales y la justicia.

“No puede ser que nosotros digamos que somos hijos de la Virgen y después nos vamos a robar mucho”, se quejó monseñor y añadió que la pureza de nuestras intenciones y acciones deben ser limpias como el corazón de la Virgen de Caacupé.

En otro momento instó a los jóvenes a sacudirse y liberarse de tantas corrupciones de la sociedad y opten por ideales grandes y sublimes. Finalmente instó a ser buenos cristianos ya practicar la palabra de Dios y venerar al santo paraguayo Roque González Santacruz.

El presidente Horacio Cartes y varias autoridades participaron de la santa misa.