Cyrus grabó el concierto acústico en un estudio de Hollywood, donde interpretó versiones minimalistas de canciones selectas de su más reciente álbum, Bangerz, y cerró con un dúo con Madonna que incluyó lenguetazos y nalgadas.
“Suena súper trillado, pero es genial actuar con Madonna”, dijo la cantante de 21 años luego de cantar una mezcla de Don’t Tell Me de Madonna y su éxito We Can’t Stop.
Acompañada por una banda de siete integrantes en un escenario decorado con pacas de heno, Cyrus le dio a sus canciones un toque country.
“Soy de Nashville. Y como no pude hacer que todos ustedes me acompañaran a casa, traté de traer Nashville aquí esta noche”, dijo la cantante.
Cyrus también incluyó en el show elementos de sus más recientes espectáculos: una persona enana, una mujer gigante y dos hombres con un disfraz de caballo. Pronunció una variedad de improperios, sacó la lengua y se contoneó de manera atrevida al ritmo de Wrecking Ball, Adore You y Drive.
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