19 feb. 2025

Mecánico influencer indonesio transformó a su comunidad

Éxito. Un mecánico influyó y enseñó a personas de su pueblo para convertirse en youtubers.

Éxito. Un mecánico influyó y enseñó a personas de su pueblo para convertirse en youtubers.

De mecánico a influencer: Siswanto, un trabajador humilde, logró tanto éxito con sus videos en internet, que sus vecinos comenzaron a imitarlo y su localidad se convirtió en el “pueblo de YouTubers” de Indonesia.

Siswanto es muy productivo. Se graba constantemente, en casa, comiendo en un café o en su moto, todo para incluir cada vez más contenidos en su página. Su historia comenzó hace 4 años cuando luchaba por ganarse la vida en su taller de mecánica en Kasegeran, ciudad en la isla de Java que la mayoría de los indonesios ubicarían difícilmente en el mapa. Estaba desesperado por obtener ingresos adicionales para alimentar a su familia y sus trabajos ocasionales como comerciante o agricultor de soja no eran suficientes.

Siswanto incursionó en la filmación de videos cortos humorísticos a pesar de tener una básica conexión a Internet, después de ver a un ‘influencer’ indonesio en la televisión que se hizo rico gracias a sus videos en línea.

“Pero nadie los miraba, así que me detuve”, contó el hombre de 38 años, que como muchos indonesios tiene un solo nombre.

“No pude entenderlos, a pesar de que soy mecánico”, dice. “Eran demasiado complicados”. Así, la anécdota se convirtió en una revelación y decidió crear sus propios videos para explicar de manera sencilla cómo llevar a cabo las reparaciones básicas.

Empeñó el teléfono móvil que compartía con su esposa embarazada y se equipó con lo necesario para comenzar a filmar sin parar.

Siswanto recuerda que “temblaba y hablaba desordenadamente”, en sus primeros videos. Pero con los años, alcanzó una audiencia de más de 2 millones de suscriptores en YouTube. Hoy tiene una agenda muy ocupada y ayudándose de un teléfono móvil simple, un trípode, un micrófono y un pequeño equipo de montaje, publica constantemente muchos videos en los que se le ve reparando motos, haciendo jardinería o pescando en un río de su aldea con un paisaje idílico de fondo.

Su negocio está en auge, dice que gana hasta 9.350 dólares al mes, lo que no pasó desapercibido en su ciudad. Rápidamente se difundieron rumores que decían que el mecánico había recurrido a la magia negra para enriquecerse. “Así que organizamos una reunión local y expliqué cómo ganaba dinero en YouTube”, dice Siswanto. “La mayoría de la gente nunca había oído hablar (de la plataforma)”.

Ofreció lecciones gratuitas para probar su historia e inspiró a unos 30 residentes de Kasegeran, que a su vez crearon sus canales de YouTube con cientos de miles de visitas.