“El convoy de evacuación con la población local no pudo salir de Mariúpol: los rusos comenzaron a reagrupar sus fuerzas y bombardearon intensamente la ciudad. Es extremadamente peligroso sacar a la gente -unos 200.000 civiles- en tales condiciones”, señaló la Alcaldía de Mariúpol en su cuenta oficial de Telegram.
Tampoco pudo llegar a la ciudad en el sureste de Ucrania el convoy con 90 toneladas de ayuda humanitaria, que salió por la mañana hacia Mariúpol desde Zaporiyia, a 227 kilómetros al este de la ciudad portuaria. Mariúpol está totalmente bloqueada por las fuerzas rusas desde hace una semana y el alcalde, Vadim Boychenko, afirmó en varias ocasiones que la ciudad se encontraba al borde de una catástrofe humanitaria, ya que se quedó sin electricidad, calefacción y agua debido a los constantes bombardeos del Ejército ruso, según dijo.
El sábado, trabajadores de Médicos Sin Fronteras (MSF) refugiados en Mariúpol con sus familias informaron que un día antes recogieron nieve y agua de la lluvia para poder beber. “Se debe garantizar urgentemente el paso seguro de todas aquellas personas que deseen y puedan escapar de Mariúpol y las zonas afectadas por la guerra dentro de Ucrania, independientemente de la existencia de corredores humanitarios o ceses al fuego que puedan establecerse temporalmente, señaló MSF.
El nuevo intento de sacar de Mariúpol a la población civil -que iba a ser escoltada por Cruz Roja, se frustró después de que el sábado ambas partes se acusaran mutuamente de haber incumplido el alto el fuego. EFE