A diferencia de la jornada del domingo, donde hubo represión policial con gases lacrimógenos contra los manifestantes debido a forcejeos contra las vallas metálicas que colocaron para impedir el paso, el día de ayer no se registraron incidentes de esta naturaleza, y la protesta se desarrolló de manera pacífica.
Reclamos. Los manifestantes siguieron a través de parlantes la sesión de los diputados desde el inicio a las 14:00, hasta el corte para cuarto intermedio dado cerca de las 19:00.
También había parlantes con música y megáfonos desde donde lanzaron arengas contra la fiscala general del Estado y contra Cartes, en alusión a la declaración del Gobierno de los EEUU que lo señaló como significativamente corrupto y vinculado a organizaciones terroristas.
Volvieron a estar presentes también los muñecos armados al estilo Judas Kái, que al final de la jornada de protesta fueron quemados.
La muñeca de ayer llevaba un vestido blanco con la foto de Sandra Quiñónez pegada en la cara, y un cartel pegado al torso frontal del cuerpo que decía “La novia de la Mafia”.
Las banderas paraguayas y los carteles también estuvieron presentes entre los manifestantes, algunos con títulos bastantes ingeniosos y llamativos, como el que señalaba: “Aquí se lava dinero, no se investiga”, en alusión a escándalos como el caso de Darío Messer, hermano del alma de Cartes, condenado en Brasil por lavado de dinero.
Tras anunciarse el cuarto intermedio, los presentes manifestaron que volverían para el día de hoy cuando se dé continuidad a la sesión extraordinaria en la Cámara de Diputados.
Escraches. Los miembros de Ciudadanos Autoconvocados Comisión Escrache (CACE), y del propio Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), entre otros grupos, además de manifestarse frente al Congreso, algunos realizaron escraches a los diputados liberales que son señalados de cartistas, como el diputado Enrique Mineur, a quien pintaron la casa “Empleadito de Cartes” y arrojaron rollos de papel higiénico.