El eje franco-alemán volvió a colocarse en vanguardia al exigir que los 27 adopten recetas comunes en la lucha contra la pandemia, que ambos consideraron como el principal desafío que afronta la Unión Europea (UE). Tras mantener una reunión de más de 2 horas en el Fuerte de Brégançon, la residencia estival de los presidentes franceses en el sur del país, los 2 líderes mostraron una amplia identidad de criterios a la hora de afrontar la agenda internacional.
Desde la pandemia a la situación de Bielorrusia o Libia, pasando por los planes de recuperación o la soberanía comunitaria, ambos líderes hicieron discursos análogos.
Solo la situación en el Mediterráneo oriental, con las tensiones entre Turquía y Grecia, parece levantar ampollas entre los dos países, pero frente a la prensa vistieron sus diferencias y enfatizaron la complementariedad de miras necesaria para obtener resultados. París y Berlín quieren avanzar con el paso coordinado y arrastrar al resto de socios. En primer lugar en el combate contra la Covid-19. “La pandemia no ha terminado y más que nunca hace falta una iniciativa europea, no nos podemos quedar en iniciativas nacionales, no se puede volver a confinar de forma local, hay que combatirlo de forma conjunta”, advirtió la canciller. EFE