Los líderes europeos, que se reúnen en cumbre los días 17 y 18, se dieron hasta el final de esta semana para considerar si hay base para un acuerdo con el Reino Unido. Pero según una fuente de Downing Street, la canciller alemana Ángela Merkel advirtió por teléfono al primer ministro Johnson de que es abrumadoramente improbable a menos de que Londres acepte lo inaceptable: mantener la provincia británica de Irlanda del Norte en una unión aduanera con la UE. Para Londres, esta exigencia hace que un acuerdo sea esencialmente imposible, agregó la fuente, subrayando que Johnson defendió ante Merkel haber presentado una propuesta razonable.
La semana pasada, Londres presentó a Bruselas su esperado plan de divorcio y pidió a sus 27 socios que hicieran concesiones para llegar a un acuerdo. De lo contrario, Johnson prometió retirar a su país de la UE el 31 de octubre de forma abrupta.
Los europeos señalaron dos puntos problemáticos en su propuesta: el poder de veto acordado al parlamento autónomo norirlandés y la necesidad de controles aduaneros entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda, país miembro de la UE. En respuesta, los británicos presentaron el lunes aclaraciones que sin embargo no responden a las demandas europeas, según fuentes implicadas en la negociación.
En este contexto, que Londres anticipase un fracaso irritó al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk: “Boris Johnson, lo que está en juego no es ganar un estúpido juego de reproches. Lo que está en juego es el futuro de Europa y del Reino Unido”, tuiteó dirigiéndose al primer ministro. AFP