El ministro de Hacienda, Óscar Llamosas, defendió también ayer el plan de gastos de la institución para el 2022. El jefe del Equipo Económico detalló que el presupuesto de la entidad llega a los G. 17,1 billones, de los cuales el 95% corresponde a obligaciones propias del Estado como el Servicio de Catastro, servicio de la deuda, jubilados y pensionados y cobertura de la Caja Fiscal, entre otros.
Sin embargo, los legisladores aprovecharon la ocasión para consultarle principalmente sobre los pedidos de ampliación que presentaron las entidades ante la Bicameral. Según los documentos, los reclamos llegan a los USD 1.051,1 millones.
El secretario de Estado aseguró repetitivamente que ese monto es “preocupante e inalcanzable”. Explicó que las proyecciones de crecimiento económico permitirían al Fisco recaudar unos USD 600 millones adicionales en 2022, dinero que ya está repartido entre los pedidos más importantes, principalmente en Salud.
Fue consultado sobre la posibilidad de aumentar el déficit fiscal por encima del 3% y de usar los derechos especiales de giro (DEG) que otorgó el FMI a Paraguay, sobre todo para financiar las necesidades de Salud y Educación.
Con respecto al primer punto, dijo que no considera viable, porque implica más deuda para gastos fijos, lo que además de aumentar el servicio del pasivo en los próximos años, hará que los gastos corrientes solamente se incrementen para 2023, en contraposición a la necesidad de ir retornando al 1,5% de déficit. Sobre el segundo tema, indicó que esos recursos ya están comprometidos para la Ley de Consolidación.
Ante la consulta sobre la opción de subir el impuesto al tabaco, el viceministro de Tributación, Óscar Orué, refirió que están analizando, pero que finalmente eso es decisión de todo el Equipo Económico.