El presidente de la Unión de Tabacaleras del Paraguay, José Ortiz, hizo ayer su descargo sobre el reciente informe del Centro de Análisis y Difusión de la Economía Paraguaya (Cadep), en el cual se reveló un supuesto esquema de millonaria evasión y envíos ilícitos de cigarrillos al Brasil.
Ortiz, gerente de Tabacalera del Este SA (Tabesa), afirmó que el estudio del organismo académico utilizó datos falsos para enlodar al sector y consideró que tiene un objetivo político claro: perjudicar la figura de Horacio Cartes, a semanas de las municipales. El ex presidente de la República es dueño de Tabesa.
En ese sentido, subrayó que los datos consignados en el estudio sobre las ventas declaradas legalmente son mucho menores a los reales. Ejemplificó diciendo que en 2019, el reporte habla de que se vendieron 371 millones de cajetillas, pero solo Tabesa, que representa alrededor del 50% del mercado local, declaró al Fisco 1.356 millones de cajetillas.
Prosiguió diciendo que el Cadep tomó como base para calcular la evasión los precios de las cajetillas en los puntos de venta al público, siendo que el impuesto selectivo al consumo (ISC) se abona por la primera enajenación y sobre el precio de fábrica, precio que suele ser mucho menor que el de la venta al público.
Ortiz pidió a los autores retractarse o, de lo contrario, advirtió con una demanda contra estos.
“Afirmo y reafirmo que esta gente es mediocre o malintencionada, probablemente con algún objetivo político. Imagínate en este momento, con la sensibilidad social tan alta, ellos insertan en la opinión pública que hay una evasión de USD 400 millones por año de un sector, y en ese sector la industria más importante es de un fuerte actor político. Si no se retractan les voy a demandar”, expresó.
EVASIÓN Y CONTRABANDO. Los principales hallazgos del Cadep en su estudio denominado Superproducción tabacalera en Paraguay, indican que la producción de cigarrillos ha sido seis veces más que las ventas declaradas de los fabricantes entre 2008 y 2019.
En ese sentido, el estudio da cuenta de que mientras se producían 2.735 millones de cajetillas por año, se declaraban 345,4 millones y se consumían localmente solo 199,4 millones.
Teniendo en cuenta estas variables y los precios de los productos, el estudio calcula que los tabacaleros evadieron entre USD 380 y USD 400 millones por año en el ISC.
De acuerdo con el reporte, que contó con la colaboración de la Universidad de Illinois, Chicago, de los Estados Unidos (EEUU), la gran brecha existente entre la producción de cigarrillos y el consumo doméstico “puede llevar a la conclusión de la posible existencia de un tráfico ilícito de venta de cigarrillos hacia los países vecinos, especialmente al Brasil”. El documento menciona que, en ese mercado negro, están incluidos los cigarrillos producidos por Tabesa, propiedad de Cartes.