El delantero brasileño de Sevilla, Luis Fabiano, dijo en conferencia de prensa que siente vergüenza por el bochornoso espectáculo protagonizado junto a Carlos Diogo (Zaragoza), el sábado último, y relató lo que su hija le recriminó.
Ambos futbolistas se enzarzaron en una pelea a puñetazos, en el último minuto del partido que enfrentó al Zaragoza contra el Sevilla (2-1). Todo empezó cuando el uruguayo pisó al ex São Paulo, y éste lo agarró del cuello. Ello se registró en tiempo de descuento y los dos fueron expulsados.
“No sabía dónde meter mi cara, sobre todo al llegar a casa y verle a mi hija de tres años diciéndome: «Eso no se hace, papá»", en referencia a que la pequeña observó por televisión el episodio que involucró al delantero.
“Pido disculpas a todos, y en primer lugar a los aficionados y al presidente. Esto que hice afecta la imagen del club”.
DESCARGA. El 9 justificó la agresión, aduciendo que el ex River Plate y Real Madrid lo insultó.
“Pienso que tengo más que perder que él, porque vivo un momento bueno, hay competencia grande en la plantilla, tenía mucha ilusión de volver a la selección y estaba en racha buena”, sentenció Luis Fabiano.
El jugador del Sevilla afirmó que Diogo le dijo “cosas que no se pueden repetir en la tele”. El delantero aseveró que Diogo “empezó la pelea, pero entiendo que todo ha quedado en el campo, con la calentura del momento”.
OPERATIVO. El Tribunal de Disciplina de la Federación Española de Fútbol no tardará en expedirse sobre lo acontecido. Habrá duras sanciones, tanto deportivas como económicas, para los dos futbolistas. Solamente resta saber quién recibirá peor castigo. Por de pronto, Zaragoza enviará alegaciones al Comité de Competición, en su intento de minimizar la sanción que recaerá sobre Diogo.
El club aragonés considera que lo que hizo Diogo fue repeler una agresión del jugador del Sevilla, que primero le dio un cabezazo y posteriormente lo tomó del cuello.