En el Ministerio de Relaciones Exteriores existen miembros de algunas familias en distintos cargos del servicio local y del servicio exterior (embajadas, consulados y representaciones permanentes), diplomáticos o no, que la ciudadanía debe conocer para observar atenta a las periódicas rotaciones, traslados y designaciones. Sobre todo para las misiones en el exterior, particularmente, en aquellos destinos más importantes.
Actualmente, los tres viceministerios que forman parte de la estructura del Ministerio están a cargo de dos funcionarios diplomáticos, que son primos entre sí: Marcelo Scappini Ricciardi y Raúl Cano Ricciardi, uno es vicecanciller y ex cuñado del ministro Euclides Acevedo; el otro es viceministro de Relaciones Económicas e Integración. Scappini es candidato a embajador ante la Oficina de las Naciones Unidas y otros organismos especializados con sede en Ginebra.
Recién desde del 2007 el ingreso a la carrera diplomática se realiza a través de un concurso nacional de oposición y méritos que abre la posibilidad a otras personas, en su mayoría jóvenes, que quieran servir al Estado desde esta profesión, sin que para ello precisen indefectiblemente de un padrino político o contar con un familiar en cargos relevantes dentro de la estructura del Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE).
El escalafón diplomático y consular se creó en 1999 a partir de la promulgación de la Ley Nº 1335, que crea esta categorización durante la administración del entonces canciller José Félix Fernández. Significó la legitimación de hechos consumados como el de la presencia de grupos familiares alojados en RREE y agarrados al Presupuesto General de la Nación.
Durante el reciente debate, en diciembre, del proyecto de ley “Del servicio diplomático, consular, administrativo y profesional del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República del Paraguay”, en el plenario, la senadora colorada Lilian Samaniego dijo que hace 20 años solamente los integrantes de 10 familias, que al mismo tiempo forman parte de una élite de distintos partidos políticos, manejan la Cancillería. Ella y otros senadores incluso citaron nombres. Sobre la composición del escalafón diplomático dijo que 159 funcionarios ingresaron sin concurso en 1999. Otros 114 lo hicieron posteriormente por orden judicial y 41, a través de un concurso interno que no figura en la Ley 1335/99.
El ingreso a los puestos administrativos y al servicio civil estuvo más sujeto a las típicas prácticas de la recomendación, padrinazgo y discrecionalidad, hasta que se tornó obligatorio llamar a concurso al aprobarse la Ley de la Función Pública Nº 1626. La configuración del funcionariado del MRE no ha permanecido impermeable a las prácticas que privilegian los cargos para parientes, o para los correligionarios que van como oficiales de embajadas o consulados.