En una entrevista que publica hoy el diario El Espectador, de Bogotá, la abogada Rojas contestó con un contundente “no” a la pregunta de si se hablaba con la colombo-francesa, rescatada el pasado julio en una operación militar.

En una entrevista que publica hoy el diario El Espectador, de Bogotá, la abogada Clara Rojas contestó con un contundente “no” a la pregunta de si se hablaba con la colombo-francesa, rescatada el pasado julio en una operación militar. EFE/Archivo | Ampliar imagen
Betancourt es “una persona de carne y hueso con cualidades y defectos”, afirmó.
La ex candidata a vicepresidente también dijo que “acompañar a Íngrid el día del secuestro” fue una “embarrada” (metida de pata) suya.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) las secuestraron en febrero de 2002, cuando viajaban por tierra hacia una localidad en las selvas del sur del país, en tareas de campaña con vistas a los comicios de mayo del mismo año, en el que Álvaro Uribe fue elegido presidente.
Ambas fueron incluidas por los rebeldes en la lista de rehenes con fines de canje por insurgentes presos que se ha reducido a 28 tras la puesta en libertad unilateral por parte de los rebeldes de seis secuestrados y el rescate de otros quince.
Rojas fue liberada en enero de 2008 en la primera de dos misiones humanitarias en las que las FARC entregaron a seis cautivos, mientras que Betancourt fue rescatada cinco meses después junto a tres estadounidenses y once militares y policías.
La ex compañera electoral de Betancourt dijo que su sueño es el de que los guerrilleros “liberen a todas las personas secuestradas”.
Rojas, madre de un niño que nació mientras estaba secuestrada, escribió un libro sobre su experiencia de seis años en manos de las FARC y que, según ella, tiene un final feliz.