Por Raúl Cortese
ENCARNACIÓN
La Municipalidad continuará realizando los operativos de ordenamiento en el circuito comercial, ante la invasión de vendedores foráneos así como el desorden que existe con la colocación de mercaderías en las veredas, obstaculizando el libre paso de los peatones. Con ello la Comuna hará cumplir la ordenanza N° 63/2011, notificando y poniendo en aviso a vendedores informales así como a locales comerciales que exhiben sus mercaderías sobre la acera peatonal.
“Así como nos comprometimos en una reunión unisectorial, estamos ordenando la zona como lo habíamos anunciado; se les dice que tienen que tener permiso y autorización y que las mercaderías no pueden tomar toda la vereda, en esta primavera comercial de la ciudad se va a mantener el orden así como la seguridad”, resaltaba el intendente de la ciudad, Luis Yd. Funcionarios municipales iniciaron, en compañía de efectivos policiales, la notificación verbal y mediante documentos a aquellas personas que de manera informal o constituida toman prácticamente todo el ancho de la vereda, entorpeciendo el libre paso del peatón, obligando a que el mismo descienda de la acera para poder continuar caminando.
INVASIÓN. El abogado Gil Fernández, de la Municipalidad de Encarnación, enfatizó que existen muchos vendedores que han llegado de otras zonas y se encuentran instalando de manera desordenada y sin autorización alguna en las veredas del circuito comercial. “Además existen locales comerciales a los que se les tuvo que labrar acta de intervención, debido a que colocan sus mercaderías para la venta sobre la vereda y están entorpeciendo el paso de terceros”, informaba el funcionario. En los últimos días se calcula la llegada de unas 200 personas que de manera sorpresiva e independiente se colocaron sobre las veredas para ofertar sus mercaderías. “De resistirse a abandonar el lugar debemos pasar a retirar las mercaderías con apoyo de los efectivos de la Policía Nacional; hasta el momento las personas accedieron a retirarse de manera voluntaria del lugar”, significaba el abogado.
Además, el Departamento de Salubridad e Higiene intervino en pequeños puestos de ventas de comestibles donde se realizaba la cocción de distintos tipos de alimentos en plena vía pública, con la manipulación de los comestibles y la preparación de los mismos sin cumplir siquiera con las medidas básicas de higiene. Ante el pedido de los mismos comerciantes instalados en la zona y la ciudadanía en general, se reclama evitar lo que en un momento fue la otrora Zona Baja de la ciudad de Encarnación, hoy desaparecida por las obras de la represa de Yacyretá.
La mencionada zona comercial representaba un desorden mayúsculo, con la colocación de mesas de madera y las mercaderías encima, ocupando un gran espacio sobre la vereda.