18 sept. 2025

La abundancia en lo pequeño

Hoy meditamos el Evangelio según san Mateo 5, 17-19.

Nos encontramos en el Monte de las Bienaventuranzas a orillas del lago de Genesaret y escuchamos parte del Sermón de la Montaña, que recoge San Mateo en su Evangelio.

Todo el paisaje habla de vida, de vida en abundancia.

Y en esa línea dice Jesús, como en sintonía con el paisaje que le rodea, a quienes le escuchaban: “No penséis que he venido a abolir la ley o los profetas: No he venido a abolirlos, sino a darles su plenitud”. En continuidad con el Antiguo Testamento, Jesús ha venido a traernos la vida plena. Quiere que seamos felices. Y cuanto más felices mejor.

Sabe Jesús que solo somos felices en la medida en que escuchamos, vivimos y difundimos su Palabra: El que cumpla y enseñe estos mandamientos será grande en el Reino de los Cielos.

Aquí, en la tierra hay que vivir en lo pequeño. La pequeñez de ahora nos hará grandes en el Reino de los Cielos. Pequeña es la santa hostia que recibimos en la comunión, y contiene la santa grandeza de Jesús.

Estos días de Cuaresma, mientras nos encaminamos a revivir la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor, son una ocasión estupenda para meditar si avanzamos en fidelidad al Señor. Si damos importancia a los pequeños detalles, si afinamos y si volvemos al camino por medio del arrepentimiento.

El papa Francisco al respecto de la lectura de hoy reflexionó “Jesús revoluciona también las conciencias en el discurso de la montaña abriendo nuevos horizontes para la humanidad y revelando plenamente la lógica de Dios. La lógica del amor que no se basa en el miedo sino en la libertad, en la caridad, en el sano celo y en el deseo salvífico de Dios, Nuestro Salvador, “que quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad”. “Misericordia quiero y no sacrificio”.

(Frases extractadas de https://opusdei.org/es-es/gospel/2022-03-23/,https://es.catholic.net/op/articulos/19746/cat/331/no-he-venido-a-abolir-la-ley-y-los-profetas.html#modal).