El fiscal Rodolfo Colmán procesó a Sosa por asociación criminal, producción de documentos no auténticos; producción mediata de documentos públicos de contenido falso y abuso de documentos de identidad, ya que se habrían creado empresas, con el fin de desviar fondos y obtener beneficios patrimoniales ilícitos.
La denuncia fue hecha por Aldo y Melquiades Ayala, quienes contrataron en el 2016 a otro imputado en la causa, Eduardo Espínola, para que dé de baja su contabilidad, porque no generaban réditos sus negocios. Sin embargo, en julio de este año, haciendo averiguaciones se dieron cuenta de que aparecían como proveedores del Estado y que su empresa generaba grandes ganancias.
Accedieron a documentos en que aparecían negocios realizados con la Municipalidad.
El fiscal Colmán llevó a cabo allanamientos en la Municipalidad de Acahay, en la casa del intendente y de Eduardo Espínola, de donde se incautaron de muchos documentos.
“Sosa Báez, en lugar de proteger los intereses de la Comuna en su rol de autoridad, habría configurado un esquema para delinquir, junto a otros funcionarios, utilizando la identidad de los denunciantes para crear las empresas.