La playa de Copacabana, el Cristo Redentor y otros lugares turísticos de Río de Janeiro se pintaron por momento de blanco y negro con la afluencia de hinchas olimpistas, que aprovecharon para pasearse por la ciudad Maravillosa en la previa al partido ante Fluminense.
Pero, quien se robó todas las cámaras fue el presidente del club, Miguel Cardona, quien fue a la playa a cantar y disfrutar con los hinchas, además organizó el operativo para que varios colectivos con hinchas vayan al estadio detrás del bus de los jugadores.
Una de las tantas visitas que tuvo el plantel franjeado en la previa fue también la del ex Olimpia, Matías Galarza, jugador canterano que fue transferido al Vasco de Gama y que se reencontró con varios ex compañeros como Hugo Quintana, Diego Duarte y los otros juveniles del plantel.