“El simposio mundial se celebra en un momento histórico en el que más de 733 millones de personas siguen sin acceso a la electricidad y el estrés hídrico afecta a más de 2.000 millones”, resaltó Undesa. Añadió que la interdependencia del agua y la energía se intensificará en los próximos años, con importantes implicaciones tanto para la energía como para la seguridad hídrica.
“Cada recurso se enfrenta a crecientes demandas y limitaciones en muchas regiones debido al crecimiento económico y demográfico y al cambio climático. Para el 2035, se proyecta que el consumo de energía aumentará en un 50%, lo que a su vez aumentará el consumo de agua del sector energético en un 85%, de acuerdo con los datos de la Agencia Internacional de Energía (IEA)”, señaló a su vez Itaipú.
Las soluciones que se presentarán y debatirán se basarán en una gama de sectores y enfoques, incluida la innovación tecnológica que utiliza la energía para el agua y el uso del agua para la energía.
“Creemos que (...) nos instan a los gobiernos, empresas y organizaciones (...) a actuar de manera cooperativa. Por lo tanto, este simposio global es una oportunidad para unir esfuerzos, compartiendo conocimientos y lecciones aprendidas sobre soluciones sostenibles de agua y energía”, indicó el director general paraguayo de la IB, Manuel María Cáceres.
50%
más será el consumo de energía en 2035, lo que elevará el consumo de agua del sector energético en 85%.