La evaluación fue sumamente positiva en cuanto al comportamiento de la ciudadanía en la Capital y el interior del país, el uso de las máquinas de votación, así como la efectividad del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP).
El éxito es doble, considerando que la Justicia Electoral sufrió un siniestro en el bloque G de su sede central, donde se destruyeron casi 8 mil máquinas de votación, y todo el hardware que utilizaba el TREP.
Las licitaciones y medidas de contingencia lograron que las máquinas de votación finalmente hayan alcanzado para las articulaciones políticas que fueron asistidas por la Justicia Electoral, así como que no hayan habido inconvenientes con el uso del TREP.
Las reuniones entre ministros y la Comisión continúan por las generales del 2023.