El médico ya formuló denuncia ante la Fiscalía de Encarnación contra personas innominadas, demanda que recayó en la unidad de la fiscala Lorena Castelvi, quien ya citó al profesional para una comparecencia testifical.
Como es sabido el ingreso del coronavirus al territorio nacional, además de paralizar al país ha obligado a las autoridades a replantear drásticamente el eje de las inversiones y acciones de Gobierno, reorientando los recursos hacia el fortalecimiento del sistema de salud. Dentro de esa premisa en Itapúa se puso en marcha el “Plan de Contingencia contra el Covid-19” con el objetivo de dotar de equipamientos adecuados a los hospitales además de remodelaciones, adecuaciones y construcciones nuevas.
En ese sentido, tomó la posta la Gobernación de Itapúa, que rápidamente proyectó una serie de acciones tanto en el Hospital Regional de Encarnación y el Hospital IPS de Encarnación. Una de las obras fue la construcción identificado como Pabellón Hospitalario y adecuación del sector de Hemodiálisis del Hospital Regional, conocido también “Hospital de Emergencia Covid-19”. Según denunció el propio médico, el cirujano especializado en traumatología y ortopedia doctor Raúl Ramírez, a través de sus redes la supuesta instalación de equipos usados para la provisión de oxígeno al nuevo “Pabellón coronavirus” y otras irregularidades relatadas en su denuncia.
Según la denuncia, la adecuación del sector de Hemodiálisis, se instaló como “nuevo” un compresor y tanque de oxígeno usado que a simple vista fue repintado, hecho que bajo ninguna circunstancia podría garantizar el abastecimiento de oxígeno a la red en el nuevo pabellón. Así también se detalla que fueron modificados varios ítems previstos en esta obra de readecuación y equipamiento, que ya fue denunciado el 23 de abril ante la Junta Departamental a través de un informe escrito del presidente de la Comisión Permanente de Asesoramiento de Obras Públicas y Servicios, concejal Carlos Pereira. Así mismo se hicieron eco de la denuncia el diputado Carlos Rejala y Walter Harms, este último incluso se constituyó en el lugar para ver in situ la denuncia del médico.
Empresa adjudicada. Para la ejecución de estas obras fue adjudicada la empresa Tinto SA con RUC 80085784-4, domiciliado en la Avenida La Paz ruta PY14, distrito de Cambyretá, Itapúa. Tinto es una sociedad anónima integrada por Julio Rubén Sykora Frisch y Eduarda Susana Lugo Rolón. Sykora Frisch es un renombrado artista plástico encarnaceno que recorrió el mundo con sus obras y a la vez esposo de Lugo Rolón. Por su parte, Lugo Rolón, además de ser socia representante legal de Tinto SA, es vicedecana, investigadora y profesora nombrada de la Universidad Nacional de Itapúa (UNI), según consta en la planilla de la Secretaría de la Función Pública. A pesar de que la ley taxativamente prohíbe que los funcionarios públicos compitan en las licitaciones, la Gobernación de Itapúa igual adjudicó la obra a la empresa de Lugo Rolón (Tinto SA) por el monto de 2.000 millones de guaraníes. Otro dato curioso según consta en la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas, esta funcionaria de la UNI a través de Ágil Consultora con RUC 1689366-2 habría “ganado” vía contratación directa varias licitaciones para consultorías, asesorías, investigaciones, estudios y proyectos de inversión para la UNI y el Consejo Nacional de Educación Superior (CONES).