25 abr. 2024

Condenan a 19 años a integrantes del grupo de Yacaré Po

Peligrosos. El juicio se realizó mediante videoconferencia.

Peligrosos. El juicio se realizó mediante videoconferencia.

Dos hombres que formaban parte del grupo criminal liderado por Yacaré Po fueron condenados a prisión, en un juicio que se realizó a través de videoconferencia, debido a la alta peligrosidad de los procesados, a quienes se los vincula con el Primer Comando Capital (PCC). Ellos son Orlando Efrén Benítez y Édgar Penayo, ambos recibieron 14 años de pena privativa de libertad, más 5 años de medida de seguridad.

Luego de tres recusaciones, finalmente se pudo realizar el juicio oral por los hechos de robo agravado, asociación criminal y violación a la Ley de Armas, cuya acusación estuvo a cargo de los fiscales Noelia Naumann y Néstor Cañete.

DETENIDOS EN EL 2015. Benítez y Penayo fueron capturados el 20 de noviembre del 2015, tras un asalto en pleno centro de Asunción. Ambos formaban parte del grupo de Nelson López, alias Yacaré Po, ya fallecido. En esa oportunidad, al menos siete hombres interceptaron un vehículo que transportaba dinero de la empresa de cambios Money Exchange, sobre la calle Cerro Corá casi Bomberos Voluntarios del Paraguay.

Tras un tiroteo con la policía, resultaron heridos Yacaré Po y Benítez, este último fue derivado al Hospital Nacional de Itauguá e ingresó a terapia intensiva bajo estricta vigilancia, por una herida de bala en el abdomen.

Mientras que el líder del grupo logró escapar y fue hasta la ciudad de Mariano Roque Alonso, pero por las graves heridas de bala se entregó y varios días después falleció.

ANTECEDENTES. Benítez ya contaba con varios antecedentes por robo agravado. Así también, en el 2012 se escapó de la cárcel de Misiones y en el 2013, de la cárcel de Concepción.

Édgar Penayo, por su parte, contaba con varios antecedentes por asaltos a cajeros automáticos.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.