“Contener a China es una misión imposible”, advirtió ayer el Ministerio de Defensa chino a EEUU, mientras la nueva administración de Biden intenta unir a sus aliados asiáticos contra Pekín. Las tensiones militares entre las dos principales potencias mundiales aumentaron bajo el mandato del ex presidente Donald Trump, quien adoptó una postura agresiva en cuestiones como Taiwán y el mar de China Meridional. Sin embargo, esta firmeza no impidió que el ejército chino haya reforzado su capacidad de disuasión y su marina en los últimos años. “Los hechos han demostrado que contener a China es una misión imposible y equivale a dispararse en el pie”, advirtió Wu Qian, portavoz del ministerio de Defensa chino. “Las relaciones militares sinoestadounidenses se encuentran ahora en un nuevo punto de partida histórico con la llegada de Joe Biden”, añadió en una sesión informativa en línea, llamando a Washington a la no confrontación y respeto mutuo. En los últimos años, China insistió cada vez más en su soberanía sobre la gran mayoría de las islas y arrecifes del mar de China Meridional, para consternación de otros países, como Malasia, Filipinas, Vietnam y Brunéi, que tienen reivindicaciones en esa zona. Ante estas pretensiones consideradas excesivas, la administración Trump envió buques de guerra a navegar cerca de las islas controladas por Pekín en nombre de la “libertad de navegación”. AFP