15 may. 2025

“Cambios en la ley diplomática sería un enorme retroceso”

El secretario ejecutivo de la Coordinadora de los Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy), Óscar Ayala Amarilla, también dejó sentada su postura en contra de la modificación de la ley que establece el escalafón diplomático y consular, que se tratará el jueves en la plenaria de la Cámara de Senadores y que está generando una fuerte polémica en el ámbito de Relaciones Exteriores.

“La modificación del escalafón diplomático es un inocultable ardid de quienes solamente piensan en las próximas elecciones y no en el futuro del Paraguay”, escribió Ayala en su cuenta de Twitter contra el planteamiento realizado por varios legisladores encabezados por la colorada Lilian Samaniego.

Ayala advirtió que de aprobarse el proyecto “sería otro enorme retroceso que echaría por tierra la profesionalización del Ministerio de Relaciones Exteriores de Paraguay”.

Al igual que los funcionarios escalafonados, quienes alertaron que la modificación de la ley significará un retroceso en las relaciones exteriores del país porque los cargos se usarán como “un gran botín político”, Ayala aseguró que en el ámbito de los DDHH también significará un gran retroceso.

“Soy testigo del crecimiento cualitativo que ha tenido el servicio exterior en las últimas dos décadas. Esto, gracias a los concursos que ha permitido ocupar y avanzar en los cargos a quienes están mejor preparados para la tarea diplomática. Ojalá el Legislativo comprenda que la propuesta de Lilian Samaniego carece de una razón de Estado y, en consecuencia, proceda a su rechazo. Solo así se podrá preservar de la voracidad partidista uno de los pocos espacios del Estado, donde los méritos propios aún sirven para algo”, indicó Ayala.

Desde la presentación del proyecto se generó una fuerte discusión porque los que están en contra afirman que la intención de los parlamentarios que están a favor del proyecto es llenar la carrera diplomática con operadores políticos.

Sin embargo, la senadora Samaniego y otros pares suyos que están a favor del proyecto señalan que los que rechazan el plan es porque ven apeligrados los privilegios de los que gozan en el servicio exterior.

La modificación del escalafón diplomático es un inocultable ardid de quienes solamente piensan en las próximas elecciones. Óscar Ayala