La investigación menciona que la mujer es funcionaria de la playa de venta de autos ubicada en la ciudad de Mariano Roque Alonso, donde recibía millonarias sumas de compradores de vehículos, pero una vez con el dinero se hacía la desentendida de la operación y no comunicaba del importe, por lo que no se daba el registro de dicho pago en la administración. Además, está sospechada de recepcionar vehículos usados, concretar la venta y quedarse con el total del dinero, sin entregar al propietario del vehículo.