07 ago. 2025

Cadetes de la Academia Militar de Pilar prestaron su juramento en la víspera

Por Juan José Brull

Parada.  Los cadetes pasaron marcialmente delante del viejo Cabildo ubicado en la ciudad de Pilar, capital del Ñeembucú.

Parada. Los cadetes pasaron marcialmente delante del viejo Cabildo ubicado en la ciudad de Pilar, capital del Ñeembucú.

PILAR

Durante la recordación del 83 aniversario del denominado Bautismo de Sangre y Fuego en la batalla de Boquerón, en las Academia Militar Mariscal Francisco Solano López, un total de 110 cadetes del primer curso prestaron juramento a la bandera. Fue en la ciudad de Pilar, Departamento de Ñeembucú.

La ceremonia se cumplió frente al histórico cabildo en la capital departamental con presencia de autoridades y ciudadanía.

Para el general Pascual Delgado Mereles, comandante de la Academia, es un momento muy especial que los cadetes vengan a Pilar.

Refirió que, en coincidencia con el Bautismo de Sangre en Boquerón de los cadetes de la entonces Escuela Militar, es que se realiza esta emotiva ceremonia.

Manifestó que el militar se nutre de la historia y eso transmiten a los cadetes.

La Academia Militar fue creada el 23 de junio de 1915 con la denominación de Escuela Militar.

En el año 1932 con motivo de la Guerra del Chaco, sirvió como base de la formación del Regimiento de Infantería número 6 Boquerón, recibiendo su bautismo de Fuego y Sangre el 17 de setiembre del mismo año, en aquella memorable batalla.

Igualmente en este sitio histórico de la ciudad de Pilar, el mariscal Francisco Solano López, héroe máximo de la paraguayidad, juró por primera vez la Bandera Nacional, cuando solo tenía 18 años.

En esa ocasión expresó con tono firme y lleno de contenido profético que “jamás caerá de mis manos esta insignia sagrado de mi patria”. Este juramento lo hizo frente al Cabildo de la ciudad de Pilar y en su recinto quedaron guardadas para siempre las frases que el gran Mariscal supo cumplirlas.