Brasil, en el epílogo de un partido que tuvo un minuto de quiebre, logró la victoria por 2-1 ante una selección de Colombia que le faltó piernas para sostener el resultado.
El encuentro tuvo un arranque frenético de ida y vuelta, donde Colombia, sin miedo, demostró que lo podía jugar con el mismo ritmo que imprimió Brasil.
Para llegar al arco rival el equipo de Reinaldo Rueda apostó por el presión alta. De esa manera, en una de las recuperaciones se lanzó por la banda con Juan Guillermo Cuadrado y este ensayó un centro que encontró inspirado a Luis Díaz, quien espectacularmente con una pirueta incluida estableció la apertura a los 10 minutos y dejó shockeada la última línea de la Verdeamarelha.
En la complementaria, Brasil copó toda la cancha, en ocasiones olvidándose de la circulación colectiva con los desbordes y apostando a la individualidad de Neymar y Richarlison.
Minuto de quiebre. A los 77 Neymar impacta el balón en el árbitro Pitana, en su intento de habilitar a un compañero. Según la regla el árbitro debió parar; sin embargo, del rebote salió el centro para el gol de Firmino y en el añadido liquidó Casemiro.
La figura
Luis Díaz
Marcó uno de los mejores goles de la competencia y fue muy solidario en la zona de marcación de Colombia.