Dos de las tres empresas más grandes de América Latina ya lo entendieron: Mercado Libre y Nubank, gigantes nacidos en Argentina y Brasil, hoy guardan parte de su tesoro en Bitcoin. Esto está muy distante de ser un capricho tecnológico, es una decisión estratégica: proteger el valor de su patrimonio en una crisis que estamos atravesando y de la que nadie quiere hablar.
Mercado Libre posee más de 570 BTC, que a precios actuales equivalen a unos 61 millones de dólares aproximadamente, lo que le ha generado una ganancia de alrededor del 180%. Nubank, por su parte, mantiene el 1% de su patrimonio en Bitcoin, aunque no ha revelado los montos. Podemos decir que para estas empresas, este nivel de inversión es efímero, pero en realidad es algo potente: marcan una tendencia. Dos empresas que dominan el comercio y la banca digital de latinoamérica han elegido resguardar parte de su tesorería en la única moneda con la que los bancos centrales no pueden especular.
Mientras tanto, en Paraguay, el tema ni siquiera aparece en las agendas corporativas. Las empresas más grandes del país continúan dejando su liquidez en dólares o guaraníes, dos monedas controladas por bancos centrales con políticas inflacionarias o dependientes. En un contexto regional donde el dinero fiduciario pierde entre 10% y 20% de su poder de compra anual, mantener tesorerías en moneda local es, literalmente, financiar el costo de la inflación a razón del esfuerzo realizado por cada empresa y sus colaboradores.
Bitcoin no es solo una apuesta tecnológica; es una herramienta de soberanía financiera empresarial. A diferencia del oro, puede dividirse hasta ocho decimales, transferirse sin fronteras y auditarse en tiempo real. Para empresas con visión de largo plazo, tener una porción de sus reservas en Bitcoin no es especular: es blindarse ante la incertidumbre monetaria y dar valor real al trabajo realizado.
Si las grandes empresas de la región ya incorporaron Bitcoin a sus balances, ¿por qué no pensar que los grandes grupos empresariales de Paraguay podrían dar el siguiente paso? Tener Bitcoin en tesorería no significa “especular”, sino proteger el valor del trabajo acumulado. Es, en definitiva, la evolución natural de una economía que busca independencia, previsibilidad y transparencia.
Así como en su momento las compañías adoptaron Internet para sobrevivir a la era digital, las que hoy adopten Bitcoin en su tesorería estarán un paso adelante cuando el mundo exija liquidez verificable, reservas incorruptibles y confianza matemática en lugar de promesas políticas.
La pregunta no es si Bitcoin llegará a las tesorerías paraguayas. La pregunta es cuántas oportunidades se perderán antes de que alguien se atreva a dar el primer paso.
