12 feb. 2025

Arzobispo pide que se priorice el interés nacional sobre el particular

Valenzuela señaló que la Justicia debería ser independiente de poderes fácticos. Interpeló si las instituciones funcionan adecuadamente para promover la familia, la vida y educación de menores.

“Ante la creciente corrupción, fruto de la falta de justicia y de honestidad de parte de varias instituciones públicas, ¿existe el interés de mejorarlas, de modernizarlas, de hacerlas más eficientes y menos burocráticas? La propuesta de la reforma del Estado, al inicio de la pandemia, ¿se llevará a término o no interesó a algunos políticos del Congreso?”, manifestó monseñor Edmundo Valenzuela, arzobispo metropolitano durante la misa central de la Solemnidad de la Asunción de la Virgen María.

Cuestionó si las variadas y repetidas manifestaciones de campesinos, indígenas, ahora de docentes y de camioneros ¿son escuchadas a tiempo? “¿Reciben respuestas rápidas, dialogadas y razonables sobre criterios de justicia y de bien común? Es bueno saber que los intereses particulares son importantes, pero los intereses nacionales no deben obstaculizarse. De ahí la necesidad del diálogo y del discernimiento, en la construcción del bien particular y del bien común”.

Destacó que hay muchas preguntas más sobre el funcionamiento de la Justicia, que debería ser independiente de poderes fácticos; sobre el impacto del narcotráfico en la política y la economía, la seguridad ciudadana, la violencia armada; sobre los secuestros y el posible apoyo de ciudadanos fuera de ley; la degradación del medioambiente, el cambio climático; sobre las cárceles; sobre la producción agroganadera; sobre desigualdades sociales.

“Todos son temas concatenados con la única realidad del país que busca tiempos mejores y un futuro pos-Covid lleno de alegría y de paz”, resaltó.

Familia. Realizó varias interrogantes sobre el tema de familia y vida. “Desde la Constitución Nacional, las autoridades públicas ¿las defienden, las promueven o se dejan imponer por ideologías condicionadas por ayuda económica internacional? ¿Evitan el doble discurso sobre políticas públicas en relación a ideologías de género, aborto, eutanasia? ¿Las instituciones nacionales funcionan adecuadamente para promover familia, vida, educación de la niñez y de la adolescencia según la cultura paraguaya y una sabia antropología”.

Señaló que son muchas las cuestiones pendientes que necesitan adecuada respuesta: “Promover la dignidad de la persona y construir el bien común, la República. Nos preguntamos, ¿hacia dónde va nuestro país? ¿Hacia el Populismo o una verdadera democracia? ¿Trabajo formal o informal? ¿Impuestos o evasiones de impuesto? ¿Salud pública o salud privada? ¿Educación escolar y universitaria con valores humanos, cristianos de calidad para todos y no solo para las élites?”.

Agregó que, por su parte, la Conferencia Episcopal lanzó su carta pastoral “Itaipú, una oportunidad de diálogo y de concertación social para el bien común”. La voz de los obispos y de muchas otras voces de la ciudadanía que claman por el diálogo y la concertación, ¿es escuchada o es ignorada?

Patrimonio. Recordó que hace tres meses la Catedral tuvo inicio de incendio. “Desde entonces quedó la tarea a las autoridades de la Secretaría Nacional de Cultura y del Ministerio de Obras Públicas, de intervenir, mediante protocolos, en la conservación de la Catedral, en especial hace falta la reparación del techo, del sistema eléctrico, de los retablos, del sistema de seguridad contra incendios, de la pintura interna y externa de este patrimonio histórico”.