Cada turbina tendrá una potencia de 90 megavatios (MW), por lo que la represa contará con una potencia instalada de 270 MW y generaría alrededor de 2.000 gigavatios hora (GWh) al año, lo que se traduce en un incremento del 10% de producción para todo el complejo de la EBY. Previo a la adjudicación y firma de contrato, Voith tuvo que superar el ensayo del modelo físico de las unidades generadoras.
Yorg agregó que el consorcio Astaldi-Rovella-Tecnoedil, adjudicado para las obras civiles, también solicitó el pago del anticipo, el último viernes. El mismo está en el orden de los USD 19 millones, a falta del procesamiento formal. Se prevé hacer el depósito en los primeros días de enero. El funcionario remarcó que todo el emprendimiento de Añá Cuá es financiado con recursos propios de Yacyretá.
“El acta de inicio de obras, con el cual inician los plazos contractuales, se prevé para fines de enero y principios de febrero. A partir de esa fecha, el contratista civil tiene 60 días para movilizarse a la zona de obras para montar su campamento y traer las máquinas. Las primeras obras civiles de la casa de máquinas van a arrancar por el mes de mayo, con las primeras excavaciones en el sitio de obras”, detalló.
TRABAJADORES LOCALES. El pliego de bases y condiciones de las obras civiles exigía que las constructoras empleen a obreros paraguayos y argentinos, de manera a dar prioridad a los países propietarios de la entidad hidroeléctrica. Al respecto, Yorg aseguró que la entidad realizará la fiscalización para corroborar que el mandato se cumple estrictamente. Normalmente las contratistas presentan su nómina de empleados cuando van a certificar determinados trabajos y la EBY se encargará de verificar la nacionalidad, más otros requisitos, apuntó.
“No vamos a mirar solamente la nacionalidad, sino que verificaremos que se cumpla todo el Código Laboral civil. Es decir, que estén inscriptos en el Instituto de Previsión Social (IPS), que se esté pagando el aporte obrero laboral; más otros seguros de responsabilidad civil, como el de vida y contra accidentes”, enfatizó.
Mitad paraguaya desde el 2023
Carlos Yorg precisó que la entrada en operación de la primera turbina está marcada para junio de 2023, dado que el plazo contractual de Añá Cuá es de 48 meses. El ingeniero afirmó que el 50% de la producción de la primera turbina ya estará disponible para la ANDE desde ese primer momento, teniendo en cuenta el reciente acto de energización de la línea de 500 kilovoltios (500 kV) de Yacyretá.
Sin embargo, señaló que será finalmente la empresa pública la que decida si contratará más energía de la EBY. En los últimos años, la ANDE redujo considerablemente su retiro de electricidad de Yacyretá y aumentó su consumo de Itaipú, pues la tarifa de la central compartida con Brasil le resulta más conveniente.
Por otro lado, Yorg comentó que avanzaron los estudios para la instalación de tres turbinas más en el parque generador de la EBY (donde hoy están instaladas 20 unidades generadoras), pero se tendrá que hacer el llamado licitatorio y aún resta definir el financiamiento.